Querido amor, pensaba en estos días lo lindo abuelo que fuiste con nuestro Ram. Dicen que la vida es una gran escuela, y tú aprendiste con creces de amor incondicional con él. Me atrevería a decir que fue una de las lecciones mas valiosas para ti, y te puso en paz contigo y con tu entorno. El tiempo que estuvieron juntos lo dedicaste íntegramente a verlo feliz. Bajaste tus barreras por completo y te entregaste plenamente. Y este amor tan grande que viviste con él te hizo amar de otra manera a todos.
Cuando te tocó el rol de papá, la responsabilidad de criar hizo que fueras exigente, estricto, rígido muchas veces. Habías recibido la misma crianza de niño y tu papá a su vez lo vivió en su niñez.
En cambio, al convertirte en abuelo, ese amor te desarmó por completo, su risa fue tu risa, sus juegos tus juegos. Te nació una paciencia infinita, todo querías enseñarle, reaprendiste a jugar sin reparos, y pasabas todo el tiempo con él en el piso, jugando, riendo, conversándole, enseñándole, identificándote con él y volviendo a ser niño.
Hoy estuve mirando fotos de ustedes dos juntos, y lloré de emoción al comprobar que no hay foto en que estén juntos y él no esté riendo, sonriendo, contento, expectante, sabiendo que a tu lado solo podría disfrutar. Tras tu partida hubo un tiempo que esa sonrisita linda se ocultó, poco a poco ha ido volviendo pero algo mas cauta.
Mas de dos años han pasado ya desde que te fuiste, y pese a que solo tenía 2 años y medio, te recuerda mucho. Le pregunté si te echaba de menos y me miro con esa mirada profunda y cómplice que tiene conmigo y me dijo: "si Oma, lo extraño muchísimo". Dejaste una huella profunda en él, y conoció de amor incondicional en tus brazos. Te amamos mucho y te recordamos mas aún. Besos para ti.
Qué hermoso homenaje lleno de amor y gratitud. Es conmovedor ver cómo el rol de abuelo transformó su manera de amar, dejando una huella profunda en quienes tuvieron la dicha de compartir momentos con él. La conexión con Ram, su ternura y esa capacidad de entregar amor sin condiciones reflejan la grandeza de su corazón. Sin duda, su legado sigue vivo en sonrisas, recuerdos y en la esencia de todo lo que sembró. Gracias por compartir estas palabras tan emotivas.
ResponderEliminarUn fuerte y emotivo abrazo.
Hola Enrique, gracias por acompañar mis recuerdos. Fue algo muy conmovedor verlo en el rol de abuelo, ver tanta ternura de su parte y también verlo aprender a ser niño también.
EliminarUn fuerte abrazo
Muy bello siempre, todo lo que fuiste compartiendo en este blog es muy emotivo y especialmente lo de hoy, esa relación del abuelo con su descendencia se destaca con claridad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Eukel, fue un rol que desempeñó con tanto amor que en corto tiempo dejó huellas profundas.
EliminarGracias por tu compañía de siempre.
Abrazos!
Los abuelos son lo mejor del mundo. Es preciosa esa foto, un hermoso recuerdo.
ResponderEliminarBesos.
Hola Hada de las Rosas, si que dejo hermosos recuerdos de su rol de abuelo. Creo que ahí aprendió a darse por completo.
EliminarBesos