Querido amor, el otro día encontré unas fotos con la Bicha y recordé como así fue que llegó a nuestra casa y aún me sigue dando risa la situación. Recuerdo que ya teníamos a Goyita y tú andabas entusiasmado con la idea de traer otra perrita a casa. Yo (según yo) había sido terminante al decir que no mas perros en casa. Pero al parecer el mensaje no fue tan claro para ti y decidiste adoptar a Bicha, pero el pequeño detalle fue que no me avisaste y llegaste con ella cachorrita sin decir nada.
Nunca olvidaré ese día, pues la contadora estaba trabajando y al ir a alcanzarle unos documentos la vi con una perrita y me reí y le comenté: "has venido con tu perrita" a lo cual me respondió "no es mía, será su perrita".
No me fue difícil saber quien estaba detrás. Jajajaja. Inmediatamente fui a buscarte para hablar del tema, pero me crucé con la Bicha en el camino y era tan encantadora que le hice cariño y el clic fue instantáneo. Nos adoptamos mutuamente. Luego me confesaste que lo habías hecho así porque estabas seguro que no me resistiría al verla y así fue. Aún puedo verte en el jardín haciéndola saltar y correr, como disfrutabas esos momentos.
Dos años mas tarde repetirías la historia con Chacha. En esa oportunidad me di cuenta cuando noté mucho movimiento en el jardín y te encontré bañándola y perfumándola para presentármela. No puedo negar que pasamos momentos lindos con ellas y nos brindaron amor y compañía. Gracias por esas travesuras, fuiste un gran papá perruno y ahora disfruto recordando.
Te mando un beso grande, grande !
Un recuerdo realmente hermoso. Las mascotas llenan grandes vacíos, son la compañía ideal y sin dudas tu compañero era un ser muy sensible con los perros, lo que habla bien de él.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Eukel, gracias! Si que brindan compañía y amor incondicional las mascotas. Vivimos lindos momentos en su compañía, en especial cuando nuestros hijos partieron del hogar.
EliminarUn abrazo