31 diciembre 2024

Otro año que se va...


Querido amor, una vez mas llega el último día del año y toca despedirlo.  Se acumulan en mis recuerdos nuestras celebraciones. En algunas nos veo  bailando sin parar en alguna fiesta, otra vez cenando en un restaurante en  medio de un apagón en las épocas difíciles del país. 

Nos veo en casa con nuestros gorros amarillos, celebrando en familia, eligiendo nuestra música favorita, brindando, encendiendo luces de bengala, preparando platillos especiales, alborotando con serpentinas y cotillón, bailando, bailando  y bailando. 

Algún año saliendo a dar vueltas con las maletas, otras veces, lanzando monedas para tener abundancia, o comiendo 12 uvas al dar las 12, siempre se te ocurría alguna novedad.

 Tantos años, tan distintos, tan especiales, tan nuestros. Y por supuesto ese abrazo que te encantaba darme apenas daban las 12. Tu mirada me buscaba y tus brazos me envolvían transmitiendo todo el amor que te cabía en el corazón, expresando la certeza de que ahí estabas para mi. 

Gracias por dejarme tan bonitos recuerdos, gracias por cada una de esas celebraciones que hoy puedo recordar con emoción. Te amo mucho y te recuerdo mas.


22 diciembre 2024

Abrazos al cielo...


 Querido amor, es increíble como vuelan los días. Parece que diciembre empezó ayer y ya estamos a 22, navidad está a la vuelta de la esquina. Será mi segunda navidad sin ti. Recuerdo que el año pasado la pasé como en una nebulosa, parecía un sueño que tú no estuvieras a mi lado. Un año mas transcurrió y nuevamente me toca celebrar sin ti. Sé que estoy mas serena, que sigo aprendiendo a estar sin ti. Que ahora aprecio mi propia compañía y busco encontrarme conmigo. 

Pero, si bien es cierto que estoy mucho mas tranquila, hay fechas como esta que me remueven. Ya noviembre vino complicado entre nuestro aniversario y tu cumpleaños.  Acuden a mi mente imágenes tuyas sonriendo, haciendo planes, entusiasmado, sin imaginar que pronto ya no estarías. Y es duro saber que no estás para llevarlos a cabo. Son días en que duele tu ausencia.

Recuerdo como te gustó siempre celebrar la navidad, en especial cuando los chicos eran pequeños. Escondías los regalos, hacías sonar campanitas y los chicos emocionados corrían a ver que era lo que sonaba. Aún puedo ver sus caritas emocionadas. Y tú feliz, eufórico, viéndolos disfrutar. 

Sé que a las 12 mis pensamientos estarán contigo y sé también que sentiré tu abrazo fuerte, estrecho, diciéndome que todo estará bien. Sé que siempre estás cerca, te siento. Te amo mucho.


08 diciembre 2024

Travesuras perrunas...


 Querido amor, el otro día encontré unas fotos con la Bicha y recordé como así fue que llegó a nuestra casa y aún me sigue dando risa la situación. Recuerdo que ya teníamos a Goyita y tú andabas entusiasmado con la idea de traer otra perrita a casa.  Yo (según yo)  había sido terminante al decir que no mas perros en casa. Pero al parecer el mensaje no fue tan claro para ti y decidiste adoptar a Bicha, pero el pequeño detalle fue que no me avisaste y llegaste con ella cachorrita sin decir nada.

Nunca olvidaré ese día, pues la contadora estaba trabajando y al ir a alcanzarle unos documentos la vi con una perrita  y me reí y le comenté: "has venido con tu perrita" a lo cual me respondió "no es mía, será su perrita". 

No me fue difícil saber quien estaba detrás. Jajajaja. Inmediatamente fui a buscarte para hablar del tema, pero me crucé con la Bicha en el camino y era tan encantadora que le hice cariño y el clic fue instantáneo. Nos adoptamos mutuamente. Luego me confesaste que lo habías hecho así porque estabas seguro que no me resistiría al verla y así fue. Aún puedo verte en el jardín haciéndola saltar y correr, como disfrutabas esos momentos.

Dos años mas tarde repetirías la historia con Chacha. En esa oportunidad me di cuenta cuando noté mucho movimiento en el jardín y te encontré bañándola y perfumándola para presentármela. No puedo negar que pasamos momentos lindos con ellas y nos brindaron amor y compañía. Gracias por esas travesuras, fuiste un gran papá perruno y ahora disfruto recordando.

Te mando un beso grande, grande !


27 noviembre 2024

Tu Cumpleaños ...


 Querido amor, hoy te he recordado muchísimo. Hoy hubieras cumplido 68 años y acudieron a mi mente recuerdos de tantas veces que celebramos juntos este día. Nuestras celebraciones fueron cambiando a través del tiempo, pero siempre lo pasamos bien.  

Recuerdo en especial el último cumpleaños que estuviste con nosotros. Estábamos en la mañana con los preparativos para recibir a los chicos que vendrían a celebrar con nosotros y me dijiste que no te fuera a comprar un regalo porque tú ya habías encargado algo que llegaría en cualquier momento.. Yo me reí pensando que era una de tus habituales bromas. Yo ya te había comprado tu perfume favorito y planeaba dártelo a la tarde cuando  soplases velitas.

De pronto sonó el timbre y me dijiste, "ya llegó mi regalo", y bajaste apresurado a abrir. Te recuerdo luego subiendo con un paquete envuelto en cartón bastante voluminoso. Te pregunté que habías comprado y te reíste pícaramente y me dijiste que era una antena parabólica. Yo te miraba sorprendida preguntándome donde pretendías poner una antena en el departamento. 

Empezaste a romper los cartones y lo que asomó de ahí fue un scooter/triciclo para bebé. Te habías comprado como regalo de cumpleaños un regalo para nuestro nieto y lo armabas apresurado para que cuando llegase lo encontrase listo. Y lo lograste. Linda fue la expresión de sorpresa y alegría de Ram cuando subió  y descubrió a la entrada el triciclo. Te pasaste todo el día jugando con él y enseñándole a usarlo. Y por ello estuviste muy feliz. Te cantamos, soplaste velitas, abriste regalos y disfrutaste tu día.

Supongo que ahí donde estés, recordaste también ese día y sonreíste; supongo también que estuviste acá cerquita pues pese a mis reiterados esbozos de llanto en la mañana, siempre algo me lo impidió y terminé sonriendo y recordando. Te amo mucho y te recuerdo siempre.

18 noviembre 2024

El encuentro...


 Querido amor, te cuento que ayer vinieron de visita Carlos y Dorita y tal como había imaginado fue un encuentro muy emotivo en el que tú también estuviste presente. Me trajeron de regalo una hermosa orquídea, que ahora contemplo mientras te escribo, y tomamos una botella de vino tinto en tu honor. 

En su visita hubo de todo, risas y lágrimas, recuerdos y anécdotas, emoción y nostalgia, cariño y añoranza.  Y en cada uno de esos momentos pudimos sentir tu presencia entre nosotros. Ellos querían saber cada detalle de tu vida desde que perdimos el contacto hasta tu partida intentando armar la parte de historia que les faltaba. Escuchaban con avidez todo lo que les iba narrando. 

Vimos fotos de los últimos tiempos y Carlos se emocionó mucho cuando le dije que tú nunca habías sido de muchas amigos y que la amistad que habías mantenido con él fue muy especial. Me contó que durante mucho tiempo pensó que fue culpa suya el distanciamiento y al escucharme comprendió que no fue así. 

Me comentaron que siempre les gustó conversar contigo y conocer tu opinión pues eras muy centrado y te gustaba saber de todo. Se admiraron y sonrieron cuando les conté que hasta el último día seguiste estudiando y aprendiendo cosas nuevas .

Pude comprobar una vez mas que las verdaderas amistades no requieren verse cada día para mantener el vínculo. La conversación fluyó con naturalidad como en los viejos tiempos, nos pusimos al día de todo lo acontecido en nuestras familias y nos despedimos con un hasta pronto. 

Recordarte con ellos fue intenso y a la vez sanador, me ayudó en el proceso de aceptar tu ausencia y apreciar todo lo compartido. Te amo mucho  y te mando un abrazo grande, grande.

08 noviembre 2024

Amigos de antaño...



Querido amor, el otro día me encontré en el supermercado con Carlos A., con quien te unió una gran amistad durante años y a quien dejamos de frecuentar cuando empezaste a notar olvidos y deterioros en tu memoria.  Obviamente, él no sabía de tu partida.  Me preguntó que novedades y tuve que soltarle la noticia de tu muerte y se quedó desconcertado.  Las lágrimas le brotaban sin parar, y yo no sabía como consolarlo.  Me apenaba verlo así, y también me sentía rara de no estar llorando con él.  Desde que te fuiste he llorado tanto  que ya soy capaz de hablar de ti sin llorar. Me dijo que le dolía mucho tu partida, que jamás imaginó esta noticia.

Pude contarle del motivo de tu distanciamiento y sentí que para él fue casi un alivio saber que no fue que de pronto su amistad ya no te importase sino que hubo todo un tema de salud detrás. Comprendió el motivo de tu indiferencia cuando aquella vez te llamó por teléfono y te mostraste tan distante. En esa oportunidad me confiaste  que no recordabas mucho de la amistad que yo te comenté compartían. 

Me habló de cuanto te estimaba, y lo mucho que disfrutaba de las largas e interesantes conversaciones que mantenían.  Que siempre te recordaría como un gran amigo, correcto, honesto y confiable. Recordamos juntos las largas noches en que nos reuníamos los 4 a conversar, compartir unos tragos, jugar dados, contarnos los caminos que cada uno de nuestros respectivos hijos iba tomando, escuchar música y filosofar acerca de la vida. Que tiempos aquellos, pasaron por mi mente todos esos momentos bonitos que compartimos.

Me pidió mi teléfono y me ha escrito para salir un día con  él y Dorita a conversar y evocar momentos. Sé que será un día removedor, pero también sé que será lindo recordar. Querrán saber detalles de tus últimos años y para mi será intenso y a la vez sanador. Es como seguir cerrando etapas.

Ya te contaré cuando nos encontremos. Será raro estar solos los 3, seguramente hallarás la manera de estar presente y acompañarnos en esa noche de recuerdos. Te amo mucho y te abrazo de corazón a  corazón.

26 octubre 2024

Recuerdos de catas...



 Querido amor, esta semana estuve recordando como nos fuimos aficionando al vino tinto. En nuestros inicios no era algo que consumiéramos especialmente pero luego de unos años se convirtió en algo placentero y bonito que compartíamos.

Creo que todo empezó cuando nos invitaron por primera vez a esa exposición de vinos. Al llegar nos dieron unas copas especiales para cata con las que recorríamos la feria visitando los stands de las distintas bodegas que nos ofrecían degustación de sus diversos vinos. Aprendimos acerca de los tipos de uvas: merlot, malbec, cabernet sauvignon eran tus favoritos. 

Nos enseñaron también algunos tips de cata como oler el vino y sentir los distintos aromas de frutos o especias, mirar a contraluz el color, mover la copa y observar las lágrimas que se forman al volver a bajar el vino,  mojarnos los labios y luego beber un sorbo paseándolo por el interior de la boca para percibir los detalles. Nos volvimos asiduos visitantes de este evento y conservo de recuerdo las copas que nos daban, el libro de cata que te compré, y todos tus accesorios. 

Cómo disfrutabas  al descorchar la botella y ver el estado del corcho, oler luego el vino y verterlo en la decantadora, dejarlo reposar y finalmente probarlo. Mientras te escribo te imagino haciéndolo. Gracias por dejarme recuerdos bonitos de momentos compartidos. Te amo mucho y disfruto al recordar.

17 octubre 2024

Shalom aleichem...


 Hola amor, te cuento que en el ensayo del último lunes cantamos Shalom Aleichem. No la habíamos vuelto a cantar desde el día de tu partida en que la cantamos para ti,  y aunque pude entonarla el lunes,  sentí que se me hacía un nudo en el corazón. 

En los últimos años, cuando empezaste a tener algunos olvidos e indicios de deterioro en tu salud mental, sentiste mucho miedo por lo que podría venir  y te aferraste a las rutinas, a los ritos, a aquellas cosas que conocías y que te daban seguridad. 

Una de ellas era cantarle a tu buen Dios algunas canciones entre las que estaba Shalom Aleichem. Lo hacías con tanta emoción, con tanto sentimiento, con tanta fe, que siempre me conmovía escucharte y  pensaba que cuando llegara el día de tu partida me sería muy doloroso escuchar estas canciones sin ti.

Resuena ahora en mi cabeza tu voz cantando, veo tu mirada conmovida, siento tu emoción, y no puedo evitar llorar con nostalgia y extrañarte. Sé que ahora descansas en paz y agradezco a Dios que tus miedos no se hicieron realidad y no llegaste a sentirte perdido.  Me consuela también haber podido estar juntos hasta el final y haber podido acompañarte, escucharte y cuidarte. Te amo mucho hoy y siempre.

 

06 octubre 2024

De paseo por la música...


 Querido amor, paseaba hoy por las calles de Miraflores cuando escuché el sonido característico de un charango en la plaza. No hice mas que escuchar la música y nos vi allá por los 80's. ¿Recuerdas cuanto nos gustaba deambular por las calles del centro, en pos de aquellos grupos de música andina que llenaban las plazas y nos invitaban a soñar en irnos a vivir a algún pueblito escondido de la sierra y tener una casita junto al río? 

Solíamos hacer estos paseos a la salida de nuestras clases de alemán.  Nos gustaba caminar juntos y todo pretexto era bueno para prolongar el tiempo compartido antes de que cada quien enrumbe a su casa.  

Recordé también el día que me sorprendiste yendo al paradero donde abordaba el bus para ir a clases,  y,  al llegar, tú ya estabas ahí esperándome para viajar juntos. Tiempos aquellos en que el amor entre nosotros iba naciendo y creciendo a pasos agigantados y cada día nos faltaba tiempo para compartir.

Tú estudiabas alemán para postular a una beca y yo lo aprendía para poder viajar a Suiza. Nos gustaba revisar el plano de Alemania e imaginar cual sería nuestro punto de encuentro cuando estuviéramos por allá. No imaginábamos aún que el amor sería mas fuerte que nuestros planes y nos quedaríamos en Lima a compartir planes, vida, sueños y formar juntos una familia.

Bonitos recuerdos los que evoqué hoy. Te amo y siempre estás en mi corazón.

.  

29 septiembre 2024

Natsukashii...


Querido amor, leí hace poco acerca de natsukashii,  palabra japonesa que significa "nostalgia feliz" y se refiere al instante en que la memoria te trae un bello recuerdo que te llena de dulzura. Me gustó y me sentí identificada pues he notado que poco a poco la tristeza que tu partida me dejó se va apaciguando  y  los muchos recuerdos que me quedan me resultan gratos de evocar.

Pensaba que este momento no llegaría, pues tu partida fue tan inesperada que me tomó completamente desprevenida y me dejó muy afectada. Se me hacía muy difícil creer lo que estaba pasando y aceptar que no te vería más. Pero una vez mas compruebo que el tiempo obra maravillas y sana las heridas mas dolorosas.  Escribirte también me ayuda mucho, hemos vivido tantas cosas juntos y hemos compartido tantos años de nuestras vidas, que son muchos los recuerdos que habitan mi corazón.

Hace poco mas de un mes falleció nuestro amigo Jorge, tras una larga y penosa enfermedad. y me ha tocado a mi acompañar y dar consuelo a Mari por su pérdida.  Nuestros procesos han sido distintos, pues tú partiste sin aviso y a ellos les dijeron hace mas de un año que en cualquier momento moriría, es como si el duelo hubiera empezado hace mucho tiempo. 

Nos tocó recordar el tiempo que compartimos los cuatro, las largas veladas, las conversaciones interminables pretendiendo arreglar el mundo, el ver crecer a nuestros hijos y acompañarlos en sus caminos. Quien sabe ya te encontraste con él allá donde estés y tendrán mucho por conversar. Te mando un beso muy grande , te amo mucho y tu presencia me acompaña siempre. 


21 septiembre 2024

Tu voz...

 





Querido amor, el otro día cerré un momento los ojos y escuché tu voz pronunciando mi nombre. Sin dudarlo extendí mi mano y sentí el calor de la tuya invitándome a pasear.  

Caminamos bordeando un río como en los viejos tiempos, nos detuvimos a descansar y nos sentamos en las rocas de la ribera. Contemplamos la corriente de agua cristalina discurrir a velocidad lavando todo a su paso, y escuchamos el sonido del agua que tanto nos relajaba escuchar.

 El tiempo se detuvo, nos miramos a los ojos y nuestras miradas hablaron y se contaron todo lo que había por contar.  No fueron necesarias palabras, el lenguaje del amor fue suficiente y vimos en segundos pasar nuestra vida ante nosotros. Nos acompañamos un momento mas, luego te marchaste y abrí los ojos.  Me quedó una sensación de paz en el corazón.  Gracias por el tiempo compartido. Besos de mi para ti.

06 septiembre 2024

Juegos de rol...


 

Querido amor, esta semana estaba pensando en nuestro tiempo juntos y me di cuenta que a lo largo de estos años ha sido como si hubiésemos jugado una gran partida de juegos de rol. Cuando te conocí habías perdido a tu mamá hacía un año y mi papá le siguió los pasos al poco tiempo. Y asumimos cada vez que fue necesario el rol de la persona que uno de nosotros necesitase. Fuimos amigos, enamorados, esposos, amantes, cómplices, hermanos, compañeros, padres, hijos, socios, colegas, depositarios de secretos.

Estudiamos juntos una época, y trabajamos juntos mucho tiempo. Siempre emprendedores, cambiando de giro según soplasen los vientos. Hubo acuerdos y desacuerdos, triunfos y fracasos, amistad y enemistad, resentimientos y perdón. Te gustaba mucho el papel de protector, y a veces me cansaba, me ahogaba,  otras me agradaba. Sin embargo no te gustaba que fuese al revés. Pero en los últimos años aceptaste de vez en cuando bajar tus defensas y permitirte ser el protegido cuando así lo requeriste. Hoy te quiero agradecer por todo esto, por haber sabido desempeñar tantos roles y haber logrado permanecer juntos tanto tiempo. Gracias por acompañar mi camino de vida. Te recuerdo con amor y te mando un beso hasta donde estes.

25 agosto 2024

Recuerdos gratos...


 

Querido amor, dicen que recordar es volver a vivir, y pienso que de alguna manera es así. Me agrada recordarte. Aún escucho el sonido de tu voz cálida y ronca, tu risa , tu mirada profunda, tus charlas interminables cuando un tema te apasionaba, tu fe. tu voz cantando para orar, tu ternura con Ramiro.

Te recuerdo sentado en tu escritorio escribiendo o estudiando, o en la silla del comedor concentrado en tu celular mientras yo dormitaba una siesta en el sillón. Tu abrazo  y bendición cada vez que yo salia, y luego al bajar, levantar la mirada para verte ahí en la ventana haciendo un gesto de abrazo para mí.

Tu paciencia cuando te pedía que me grabes algo para el coro y lo hacías una y otra vez hasta que saliera bien.  Justo el otro día encontré uno de estos videos en que nos estamos riendo porque nos comunicamos mal y grabaste cuando aún no estaba lista. Cosas tan nimias que ahora conforman un mundo de recuerdos.

Me gusta también recordar nuestras mañanas en el parque, cuando salíamos a trotar y tú saludabas a todos los perros que sacaban a pasear a esa hora y a mi me daba risa que te supieras sus nombres y no los de sus cuidadores. Te recuerdo también jugando con Bicha, haciéndola saltar a recoger la botella y ella feliz luciéndose. O cuando Chacha te esperaba impaciente que llegues de la oficina para que la lleves a pasear.

Te recuerdo en el jardín de la casa, dándole de comer a los pajaritos que anidaban ahí, e imitando tan bien el silbido de cada uno de ellos que lograbas que bajen confiados a comer.

O nuestras maratones de series, comiendo canchita o panes con aceitunas y queso. No me he vuelto a enganchar con ninguna serie, en realidad casi no veo tele ahora. Creo que lo divertido era compartir el momento mas que lo que veíamos.

Me asusta pensar que con el tiempo tu recuerdo se vaya diluyendo y no logre visualizar tu imagen, ver tus ojos, oír tu voz o sentir tu abrazo. Espero que no sea así. Te mando un beso grande.

15 agosto 2024

Ha llegado una carta...


 

Querido amor, conversaba el otro día por teléfono con Artu y me pregunta: "¿sigues escribiéndole a mi papi?", le comenté que si, que lo hago con cierta regularidad, según me vienen los recuerdos o la necesidad de volcar mis pensamientos/sentimientos y se rió y me dijo que se imaginaba a san Pedro en la puerta del cielo recibiendo la carta y llamando en voz alta:" Roskolgo!!!! Ha llegado otra carta para ti!!!"

Nos reímos mucho con su ocurrencia e imaginando la escena. Esto me llevó a pensar que cada vez son mas las veces en que recordarte ya no duele, y que incluso puedo sonreír evocando momentos, vivencias, costumbres nuestras. Fuiste una persona muy especial y dejaste huella en tu paso por nuestras vidas y muchas cosas que recordar.

A Ram, por ejemplo, le encanta que le cuente anécdotas tuyas.  Pese a ser muy pequeño y solo haberte gozado 2 años y medio, él también te recuerda mucho y le costó aceptar tu ausencia  y adaptarse a ella. Le gusta cuando le cuento como podías imitar el sonido de los pajaritos que anidaban en nuestro jardín, y como comían prácticamente de tu mano, incluido el ratoncito (Stuart) que acogimos un tiempo.

También se divierte cuando le cuento como te molestaba que poden los árboles en el parque, no aceptabas que luego estarían mejor y llenos de brotes nuevos. Y ni que decir de como le gusta tener objetos que fueron tuyos y que sabe que te gustaban. Tus cubos mágicos, tus linternas, tus lupas, tu juego de domino, tu reloj que le habías dejado en su sala de juegos. Siempre quiere saber mas de ti. Me encanta comprobar que el amor que le diste caló profundo y que tu recuerdo anida en su corazón. Te amamos y recordamos siempre. Besitos.



05 agosto 2024

¿Bailamos?

 



Querido amor, pensaba estos días en que uno de los recuerdos más bonitos que tengo contigo es lo mucho que nos gustaba bailar.  Hubo un tiempo en que lo hacíamos con bastante frecuencia.

La primera vez que bailamos juntos fue en una fiesta a la que fuimos  antes de ser enamorados, y cual no sería mi sorpresa cuando me invitaste a bailar una salsa y resultaste tremendo bailarín. Me comentaste que habías vivido como seis años en Panamá y de ahí tu afición. Eso me encantó pues a mi me gustaba mucho bailar.  Me contabas anécdotas de Willie Colón, del Gran Combo de Puerto Rico, de la Fania, de Johnny Pacheco,  y tantos más, era muy entretenido escucharte.

Ya de enamorados solíamos ir los fines de semana a alguna discoteca y nos divertíamos mucho. Como olvidar nuestras salidas con tu amigo Pedro que cada sábado llegaba con una chica distinta, eso siempre nos causaba gracia pues nunca llegaba a encontrar a la chica de sus sueños.  

Mas adelante, ya casados reemplazamos las discotecas por hacer reuniones bailables en  casa con algunas parejas amigas y cuando nacieron los chicos, las reuniones se volvieron reuniones familiares pero siempre había música y la invitación a bailar.  Con el paso del tiempo se fueron espaciando estos momentos.  Los reemplazamos  por compartir una copa de vino y mucha conversación o ver alguna serie en la tele.

La última vez que bailamos fue en el matrimonio de nuestra Va. Increíble cuanto nos  divertimos esa noche, no paramos de bailar de inicio a fin de la fiesta, estuvimos incansables. Que linda oportunidad nos dio la vida de volver a revivir esos momentos y gozar bailando. 

Muchas veces escucho toda esa música que nos acompañó durante nuestro tiempo juntos y en mi corazón bailamos, y a veces incluso, me animo a dar unos pasitos de baile. Te amo mucho y te mando un beso enorme.

29 julio 2024

Vivir despedidos...


 

Querido amor,  después de tu partida participé de un círculo de duelo en el que hablamos de aprender a aceptar, respetar el proceso individual de duelo y tomarnos el tiempo que cada quien requiera para poder continuar en paz el camino de la vida.  

Una de las tanatólogas dijo que en realidad todos  deberíamos  "vivir despedidos" de nuestros seres queridos, es decir, en paz y sin temas pendientes. Que hacerlo facilitaría mucho el camino.

Resonaron estas palabras en mi, pues es algo en lo que yo había venido cavilando desde hace algunos años, cuando la que partió inesperadamente fue mi hermana Cristi. Recuerdo que aparte del dolor y la tristeza que me embargaron en esa época al pensar que no la vería mas, daba vueltas en mi cabeza la idea de que la muerte puede llegar sin previo aviso y que es importante vivir en armonía con todos.  Y así he tratado de vivir. 

Sin embargo, siempre imaginé que cuando la muerte tocase nuestra puerta, sería con alguna enfermedad que nos permitiría tener el tiempo de hablar del tiempo compartido, pedir perdón y perdonar si hubiera algo pendiente, decirnos te amo una vez mas mirándonos a los ojos, darnos un abrazo estrecho, muy estrecho, que hablara por nosotros, agradecer la vida compartida con todos sus altibajos y darnos el permiso de dejar al otro partir en paz tomados de la mano.

Ilusa yo, pues las cosas no salen como uno quisiera. La vida tiene su propio ritmo y toma su rumbo propio. Tu partida fue tan inesperada que todo lo que pensaba yo sucedería en calma y con tiempo nos tomó por sorpresa y  tuve que conformarme con susurrarte al oído ese perdón, ese te perdono, ese te amo, y ese puedes volar en paz con la certeza de que tu alma escucharía a la mía.  

Y quedarme con ese abrazo largo y lleno de amor que nos dimos la última vez que nos vimos y ese último mensaje de whatsapp que leo con frecuencia "te amo y los amo muchísimo". Igual te amo yo y te agradezco por la vida compartida.

21 julio 2024

Un buen consejo..


 

Hola amor, hoy estuve recordando cuando decidimos casarnos.  Corría el año de 1982, yo tenía 20 y tú 26. Llevábamos 3 años de enamorados y pensamos que ya no queríamos separarnos así que muy decididos nos encaminamos a la iglesia central del distrito y conversamos con el padre Rosendo. 

Recuerdo que nos hizo pasar a su despacho y nos preguntó que nos llevaba por ahí.  Le dijimos que queríamos que nos case. Nos miró sonriendo y nos dijo que las cosas no eran así de sencillas. Que teníamos que estar muy seguros de nuestra decisión antes de dar el paso y que nos dejaba de tarea asistir a un encuentro para novios de un fin de semana. Que fuéramos con calma, escucháramos las charlas y que si luego del encuentro seguíamos decididos lo buscáramos. Y así llegamos al encuentro para novios.

Fue un fin de semana super intenso, dirigido por parejas de matrimonio de larga trayectoria que nos hablaban de diversos temas como el  amor en el día a día,  la convivencia, los conflictos, la familia, el respeto,  la economía en la pareja y muchos temas mas. Después de cada charla nos separaban y cada uno llenaba un cuadernillo de preguntas, luego nos juntábamos y debíamos leer juntos nuestras respuestas y ver coincidencias y diferencias. La idea era evaluar afinidades y comprobar si la pareja caminaba en la misma dirección. 

Hubo momentos en que revisando nuestras diferencias,  llegamos a dudar de nuestro deseo de casarnos pero ya para finalizar el encuentro decidimos que si nos casaríamos y así lo hicimos al año siguiente.  

Un consejo recibido en ese encuentro nos acompañó a lo largo de nuestra vida en común. "No se vayan a dormir enfadados. Si tuvieron algún conflicto durante el día intenten solucionarlo antes de dormir". A ambos nos pareció importante.

No siempre logramos llevarlo a cabo, hubieron ocasiones de conflictos fuertes, diferencias que parecían irreconciliables y brechas que se abrían y se veían insalvables. Yo solía resentirme con algunas actitudes tuyas y era mas de silencios. Tú eras más explosivo.  Pero ese consejo estuvo siempre presente en nuestros pensamientos e intentamos aplicarlo en muchas ocasiones. 

Y así logramos sostener un matrimonio de 40 años que en los últimos años fluyó con naturalidad, buena comunicación y cercanía. Gracias por seguir siempre intentando continuar juntos, ambos pusimos de nuestra parte y lo logramos. Te mando un beso grande de corazón a corazón.


13 julio 2024

Huellas en el camino...


 

Querido amor, el tiempo sigue avanzando. Ha pasado ya año y medio desde tu partida, han habido entremezclados días de calma y días de nostalgia, días grises y días luminosos, días de recuerdos gratos, días de recuerdos duros. Y es que indudablemente la vida es así, está compuesta de todos esos fragmentos que terminan conformando un todo y que a veces desagregamos o separamos pero que vistos en conjunto son lo que somos o lo que tenemos. 

Fueron muchas las oportunidades en que me dijiste que tú querías irte primero porque no sabrías continuar sin mi y tu deseo se cumplió.  Encuentro en el día a día  fuerza y fortaleza para continuar.

Me agradan los días en que me siento serena, tranquila, segura. Días en que puedo mirar hacia atrás con una sonrisa y apreciar el conjunto de lo que fue nuestra vida en común. Muchos caminos hemos transitado, muchos pasos hemos dado, textual y metafóricamente.  

Ahora toca caminar sola, a veces por mi propia senda, otras siguiendo tus huellas, ambos caminos me agradan. Tus recuerdos permanecen, tus abrazos me acompañan, tu mirada no la olvido. A veces incluso me descubro haciendo algún gesto tuyo, o usando alguna de tus frases y sonrío en mi interior.  Te amo y te recuerdo siempre.



06 julio 2024

Caminando juntos...


 

Querido amor, te cuento que hoy participé de un taller de David Fischman cuyo tema era "sana tu niño interior". 

Sentí que a ti también te hubiera gustado estar ahí. Fue un trabajo sumamente intenso el que hicimos mirando en retrospectiva nuestras vidas, recordando episodios del pasado y tratando de identificar heridas de infancia para sanarlas.

Me identifiqué en algunas de las cosas que mencionó y te identifiqué también a ti en otras. Actitudes o reacciones  que a veces me desconcertaban y que de pronto hoy cobraron sentido. Creo que a nuestra manera supimos apoyarnos y complementarnos también en esas carencias.

Me parece admirable como siempre encontramos la manera de continuar pese a las diferencias o discrepancias. Pienso que los dos sentíamos que valía la pena lo que construíamos y así persistimos contra viento y marea, muchas veces con el viento a favor y otras tantas bregando contra corriente.  Aprendimos a aceptarnos con el "paquete completo" como bromeamos alguna vez. Y supimos ser cada uno a su manera soporte para el otro cuando fue necesario.

Me alegra ahora mirar hacia atrás y ver que no nos dimos por vencidos, y que el amor que en su momento nos unió y pasó por tantos cambios, momentos y evoluciones logró permanecer, mas maduro, sereno, calmado y nos acompañó hasta el final de nuestro camino juntos. Te amo y te recuerdo siempre.



29 junio 2024

Del día a día...


 

Querido amor, hoy por la mañana estaba cocinando mientras  escuchaba música y me percaté que muchas canciones me evocaban algún momento compartido contigo.  Estás presente en la mayoría de mis recuerdos, sean estos alegres, tristes, dolorosos, nostálgicos. No en vano compartimos 44 años de nuestro camino juntos. Tantos momentos importantes, tantos triunfos y fracasos, tantas caídas y levantadas, tantos acuerdos y desacuerdos, tantos puntos de quiebre y tantas reconciliaciones. Tanto amor a través del tiempo, amor que fue cambiando, madurando, pasando por muchas etapas.

El otro día tuve el almuerzo anual con las chicas del colegio y una de ellas me preguntó cómo estaba llevando la vida sin ti. Le comenté que  había encontrado mi manera de procesar el duelo escribiéndote cartas. Me miró sorprendida y me contó que a ella también le hacía bien escribir, pero nunca había visto la escritura como terapia.

Su pregunta quedó rondando en mi cabeza, ¿cómo estoy?

Pienso que  aprendiendo a vivir con tu ausencia. Aún te echo mucho de menos, en especial en lo cotidiano. También te extraño cuando tengo algún malestar y me falta ese refugio seguro que encontraba en ti en esos momentos. 

O en esos domingos de flojera compartida donde un par de butifarras para el almuerzo, una tarde de siesta/lectura/música , y una noche de maratón de tele eran mas que suficientes para un día perfecto. Y, por supuesto, extraño tus abrazos, aquellos que podían recomponer el mundo. 

Te amo mucho y te abrazo donde sea que  estés.



23 junio 2024

Tus manos...


 

Querido amor, estaba viendo fotos nuestras estos días y recordé lo especiales que eran para mí tus manos. Tenías manos fuertes, y te gustaba esa fuerza. Muchas veces ocurría que al estrechar la mano de algún amigo, este hiciera algún comentario al respecto y tú lo disfrutabas.

Siempre te gustó fortalecerlas, amabas hacer planchas, el box, las pesas. Justo le comentaba a Ramiro el otro día como hacías planchas con los chicos sentados en tu espalda, o apoyado en tus nudillos, lo que había ocasionado que tuvieras callos en ellos y eso las hacía distintas.

Como olvidar cuando colgaste un saco de box en el jardín y entrenabas arduamente en él y a toda costa me querías convencer de intentarlo. Alguna vez te hice caso y me pusiste las vendas y guantes y me enseñaste algunos golpes. Querías que yo también fuera fuerte.

Pero lo que mas me sorprende al recordarlas es que esas mismas manos fuertes podían ser tan cálidas al caminar tomados de la mano, se sentían protectoras, seguras. Esas manos fueron las que me sostuvieron al dar a luz, y me transmitieron fuerza y la certeza de que si podía. 

Esas manos  me ayudaban cuando algún malestar me aquejaba y me cobijaban cuando me atemorizaba.  Manos que supieron de caricias, de juegos, de trabajo,  de rudeza, de posesión, de contención, de entrega.

Cierro los ojos y puedo verlas y sentirlas con nitidez. Te extraño y te amo siempre.


12 junio 2024

Una tacita de café...


 Querido amor, estos días estuve recordando cuanto disfrutábamos de compartir una tacita de café. Eran momentos bonitos cuando nos alistábamos el café, elegíamos la tacita que nos apetecía usar y lo servíamos. Algunas veces café pasado, otras, de la maquinita de cápsulas. Tú solías elegir expreso y yo cappuccino, aunque a veces me animaba también por el expreso. En muchas ocasiones lo acompañamos de un bocado de chocolate.

También ocurría con frecuencia que cuando yo llegaba a casa, me recibías con café recién pasado. Te gustaba que todo el ambiente se llenase de olor a café. Al entrar, me servías una tacita y  me observabas mientras lo probaba para ver si me había gustado tu mezcla del día. 

Tenías guardado en frascos distintos tipos de café y te gustaba hacer mezclas e ir probando cual era la combinación perfecta, como todo un barista. Tu favorito tenía sabor muy intenso y amargo, casi espeso y  lo endulzabas apenas para sentir su sabor.

A ti siempre te gustó el café, e incluso hubo una época en que tomabas demasiadas tazas al día y tuviste que irlo dosificando pues te estaba causando daño.  

Contigo aprendí, entre otras cosas,  a disfrutar de una buena taza de café. Extraño compartir un cafecito juntos y muchas veces hago mezclas como tú a ver que tal sale. Te amo mucho y siempre te llevo en mi corazón.


02 junio 2024

Nuestra música...


Querido amor, hace ya algunos días que vengo pensando en lo importante que fue la música para nosotros, nos acompañó en cada etapa de nuestro camino.

Fuimos variando de gustos y de géneros, pero siempre hubo música. Tu música, mi música, nuestra música. Me sucede con frecuencia que al escuchar una canción, recuerdo determinado momento de nuestra vida. Muchas veces la emoción me gana y se humedecen mis ojos, se alborota mi corazón y mi mente viaja a kilómetros de distancia para revivir esos momentos. 

Cuando recién nos conocimos,  solías cantarme:

 "Necesito alquien que me emparche un poco y que limpie mi cabeza, que prepare guisos de madre, postres de abuela y torres de caramelo, y que ponga tachuelas en mis zapatos para que me acuerde que voy caminando y que cuelgue mi mente de una soga para que se seque de problemas...".  

Yo no la conocía y pensaba que eran ocurrencias tuyas, ya luego supe que era una canción de Sui Generis pero la cantabas con tal énfasis que yo sentía que fue escrita por tí para mí. Fue por mucho tiempo nuestra canción. Luego me dedicaste "la quiero a morir" y  se sumó a nuestras canciones.  Y la lista de canciones, de cantantes, de géneros, de momentos fue creciendo y creciendo. 

En muchas ocasiones pasamos horas retrocediendo  cassettes para poder sacar la letra de alguna canción que nos encantase.  Nos veo caminando, bailando, cantando, conversando, en silencio,  acompañándonos, compartiendo, en acuerdo, en desacuerdo, cercanos, distantes, disgustados, reconciliados, pero con la música presente, movilizando sentimientos, o expresando lo que con palabras no siempre sabíamos expresar.

Estoy haciendo una lista, una recopilación de canciones que de una u otra manera me llevan a ti, será una forma más de recordarte.  Hoy fue una de esas tardes escuchando música y extrañándote. Te amo y te echo mucho de menos.

Besos 

.

26 mayo 2024

Recuerdos...



Hola amor, esta semana se me presentó un reto, un momento difícil, en el que no había pensado antes, pero que tenía que llegar.

En una actualización de información que tuve que hacer, al llenar el formulario me encontré con la casilla " estado civil" y tuve que cambiar el casada por viuda. Primera vez que lo escribo, lo pienso, lo verbalizo, lo asimilo, lo asumo. Viuda, quedó resonando en mi cabeza la palabra, viuda...

Con el paso del tiempo he ido aceptando el hecho de que ya no estás acá conmigo, que ahora formas parte de mi pasado y que mis días a partir del día de tu partida ya no te tienen a ti a mi lado. Pero enfrentar este momento  y decir "soy viuda" lo hace mas real, es como aceptarlo a otro nivel, y  me desconcertó como me sentí al respecto. Fue volver a foja cero por un momento, volver a vivir ese momento de aceptación y de despedida.

Y recordé aquella noche, cuando te dio el infarto. Una enfermera que fue como un ángel, esos que siempre aparecen en el momento preciso,  movió cielo y tierra por dejarme pasar a verte. Estabas inconsciente, conectado a muchos aparatos, pero yo solo recuerdo que te abracé mucho, te besé, te tomé de la mano y te susurré al oído cuánto te amaba, cuánto te amábamos todos. Tuve la oportunidad de decirte que todos estábamos en paz contigo, y que si tenías que partir lo hicieras en libertad. Y sentí tu presencia ahí, sentí tu amor, sentí tu tristeza, te sentí en paz e intuí que te ibas.

Transcurrió exactamente una semana desde ese día, hasta aquel 11 de enero en que me avisaron que habías partido. Cuando fui a verte, ya no te sentí ahí, ya no te vi, ni siquiera te reconocí, tu esencia ya no estaba. Había volado una semana antes, cuando te besé por última vez. Tu cuerpo permaneció esos días, mientras los médicos trataban de lograr lo imposible pero tu alma ya había volado en libertad.

Agradezco que no hayas tenido que sufrir una larga enfermedad, o haber quedado en vida con las graves secuelas que advertían los médicos hasta el cansancio que podría suceder. Me alegra que no hayas sufrido, me alegra no haberme aferrado, me alegra haberte podido hablar esa noche, me alegra que me hayas esperado, me alegra que hayamos quedado en paz. 

Te amo mucho  y pienso en ti cada día. Siempre hay algún recuerdo tuyo en mi corazón.  Te mando muchos besos hasta ahí donde te encuentres...

19 mayo 2024

Opa...


 

Querido amor, hace pocos días hemos podido volver a prender la música del organito de Ram. Tras tu partida intentamos muchas veces encenderlo pero Ram lloraba y ya no le gustaba escucharlo. Todos supusimos que escucharlo lo remontaba a todas aquellas veces que lo escuchó contigo, y recordábamos especialmente el día que tú, él y Arturo bailaron felices con sus melodías. 

Como olvidar cuando le cantabas imitando el sonido de la trompeta el cascanueces que sonaba ahí, y luego tú, traviesamente, le cantabas el "cascamaní" y el "cascapecanas" y creo que hasta hubo un "cascaavellanas".  Nunca supe si inventabas las melodías en ese momento o si eran melodías que tú conocías y les cambiabas de nombre para divertirlo. Lo cierto es que se divertían y mucho.

Pienso con frecuencia que el tiempo que tú y él compartieron fue un regalo invalorable para los dos. Como olvidar sus gritos llamándote apenas entraba a nuestra casa. "Opa! Opa!" resonaba su voz a todo pulmón, exigiendo tu presencia inmediata para empezar a jugar y divertirse juntos. Fuiste un lindo Opa, le diste amor incondicional a manos llenas y te desviviste por verlo feliz y hacerlo reír.

Cuantas carcajadas compartimos cada vez que jugaba con tu barba y yo te cantaba "mi barba tiene tres pelos..." y tú te "quejabas" aduciendo que tenía mas y él reía a mas no poder. Todo era divertido cuando estaban juntos. Jugar a la pelota, jugar con los cubos mágicos, comer dátiles, cocinar, hacer sonar la licuadora de juego, ayudarte a limpiar, construir, llevar arrocito a las palomas en el parque, correr de la mano en el parque, inventar juegos en el pasillo, acompañarte a encender velas, jugar con las fichas del domino, disfrutar de las gelatinas que le preparabas y muchos etcéteras.

Toda la rigidez , seriedad y disciplina que tuviste cuando fuiste papá, se disolvió cuando fuiste abuelo. Siento que en tu relación con Ram, tuviste la oportunidad de enmendar los errores cometidos con los chicos y sanar así tu relación con ellos. Lograste por fin bajar tus barreras, entregarte al amor , reconciliarte contigo e incluso dejar salir a tu niño interior.

Ram lamentó muchísimo tu partida, hubieron muchos días de gran tristeza e incomprensión ante tu ausencia. Le costó mucho entender lo que significa morir y aceptar que ya no te vería más. El tiempo va ayudando, haber logrado escuchar sin tristeza el órgano es un gran paso, también le gusta que le cuente a qué jugaba contigo y a veces me pide jugar a que yo soy tú y juego con él. Y así lo hacemos y le gusta. Dejaste mucho amor en su corazón y estoy segura que ese recuerdo cálido de tus abrazos interminables vivirá por siempre en él. 

Me alegra mucho que hayas tenido esa segunda oportunidad, gracias por tantos momentos bonitos, gracias por todo tu esfuerzo en el día a día por ser mejor persona, lo valoro mucho y te recuerdo con amor. Besos hasta donde estés...


11 mayo 2024

Tengo algo que contarte...


 

Querido amor, ayer viajó de regreso a Alemania Arturo. Llegó justo el día de mi cumpleaños y se quedó casi 3 semanas. Pasamos lindos momentos en familia, y tú también estuviste presente en muchas anécdotas y recuerdos compartidos.  En esta oportunidad hallé muchos detalles de ti en él ,  principalmente en detalles, manías y reacciones.  Sucedía que me contaba alguna anécdota y notaba yo el parecido y al mencionárselo me decía que él también se había percatado. 

Fueron muchas las ocasiones en que me mencionaste que te apenaba que él estuviera solo allá, que  sentías que a él le haría bien tener una pareja. Recuerdo incluso que cada vez que nos contaba de alguna amiga, te ilusionabas imaginando que sería su pareja.  

Hoy tengo algo que contarte, que quizás tú ya intuías o quizás no. Arturo ya no está solo, tiene pareja y en esta oportunidad ha venido con él. Su nombre es Daniil, y es de Bielorrusia, aunque lleva buen tiempo  viviendo en Alemania. Su familia vive en Polonia. Hacen una linda pareja, y sobre todo se les siente felices, en armonía, compenetrados, amigos. Se tratan con amor y respeto y noto que se cuidan mutuamente.  Me parece un buen chico, algo tímido, juguetón, con alma de niño. Vieras que lindo jugaba con Ram, y él estaba feliz y encamotado con Daniil.

 Ellos viven juntos allá, han alquilado un departamento hace unos meses.  Arturo está feliz, lo siento mas pleno, mas tranquilo, mas seguro. Pienso que al verlo así, habrías roto con tus prejuicios y le habrías dado tu bendición.  Lo merece, merece ser feliz, aceptado, amado, apoyado. Merece vivir libre, sin tener que esconderse o tapar lo que siente. Me hace feliz verlo así y les he dado mi bendición e incluso les comenté que si tú vivieras, probablemente hubieras sido tú el que lo hubiera hecho.

Es curioso que Daniil tiene muchas cosas en común contigo. Le encanta el ajedrez y suelen jugar juntos sendas partidas.  La última vez que vino Artu, me pidió llevarse tu tablero de ajedrez, el que es imantado, y con el que solías jugar siempre.  Se lo llevó y me cuenta que es el que mas usan en sus partidas. También le dí algunos de tus libros de ajedrez.  Otro punto que tiene en común  contigo son las matemáticas, es su profesión.  Hubieran tenido buenos temas de conversación. 

Espero que te alegres tanto como yo de saber que nuestro Arturo está feliz. Me alegra haber compartido esta buena noticia contigo. Te amo mucho y te mando muchos besos.

02 mayo 2024

Tiempo le pido al tiempo...


Hola amor, hace días que me viene a la cabeza uno de tus versos favoritos . "Tiempo le pido al tiempo y el tiempo,  tiempo me da, más el tiempo, tiempo pasado, es tiempo que no volverá". 

Cuanta verdad en tan pocas líneas. Y ahora las siento con más fuerza y  más certeza.... es tiempo que no volverá....

Puedo recordarte de una y mil maneras. Sonriendo, con el ceño fruncido, hablando incansable, cantando,  concentrado en tus cosas, rezando,  disfrutando de una copa de vino, alterado, soñando en comprar tu finca en España, bendiciendo, molesto por la actitud de alguien en la calle, celoso, haciéndome adiós por la ventana, corriendo a mi lado en el parque, tomando notas, estudiando, dirigiendo tu negocio, estresado, preocupado, relajado,  compartiendo una serie o una película en la tele, comiendo rico, asustado, jugando, queriendo ganar, chocho con tu nieto, y mil cosas mas.

Puedo recordarte, pero son cosas que no volverán a pasar, solo permanecen en mi recuerdo y en mi corazón. 

Ayer vi unas fotos tuyas.  En una tenías un brillo fantástico en la mirada, y esa mirada se  ha quedado grabada en mi mente. 

En otra foto, estamos con los chicos en el parque y al tomarnos una foto, mientras todos miramos a la cámara, tú me contemplas a mí con amor. 

Y en otra más, es mi cumpleaños y tienes una cara de ilusión increíble como si fuese tu cumpleaños. Porque así te gustaba celebrarme, contentarme, consentirme, así a veces tuvieramos desacuerdos o  me hicieras renegar, tu amor era infinito. 

Y pensé también en que cada quien que te recuerde, lo hará desde su propia perspectiva, o con distinto apelativo. Serás Rolando, Ro, Rolandito, Amor,  Ruli, Papá, Papi, Papito, Pap, Opa, Rolo, Roskolgo, Roskolguito, Jefecito, don Rolando, señor Rolandito, etc. 

Te extraño, y te recuerdo cada día. Te mando un beso enorme. 

26 abril 2024

Tus tesoros...



Querido amor, tras tu partida me quedó pendiente la tarea de revisar, separar, conservar, regalar, o decidir el destino de tus cosas.  Si que ha sido una labor complicada. En primer lugar porque me sentía como una intrusa revisando tus cosas, tus tesoros, tus recuerdos. Me ha costado mucho tiempo y esfuerzo hacerlo, y muchas dudas, y muchas lágrimas también. 

Revisar tu ropa, separarla, olerla, recordar cuando usaste tal o cual prenda, cuales eran tus favoritas, tus domingueras, tus ropas de casa.  Imaginarte vestido así o asa. Ver tus relojes, tus anteojos, tus gemelos.

Ver tu colección de cubos de rubik, y tus apuntes conforme lograbas irlos resolviendo. Cuanta paciencia y dedicación tuviste. Tus tableros de ajedrez y tus libros de partidas analizadas.

Otro de los lugares complicados fue tu laboratorio (taller, hueco, deposito, almacen, refugio, oficina) . Tenías tantas cosas ahí. Libros, manuales, herramientas, cuadernos, lapiceros, lamparas, cajas de cajas, cosas por arreglar, repuestos, y mas herramientas.  Increíble cuanto podía caber en un cuarto tan pequeño. Tenías tantas aficiones, tantas habilidades, tantos proyectos, que siempre te faltaba espacio.

Cuantas veces bromeamos acerca de tus infinitos cachivaches, y tú siempre diciendo:  "esto puede servir".  Mentalizarme que son cosas que yo no voy a usar, que yo no voy a necesitar, que no me voy a convertir en electrónica, ni voy a entender libros de matemáticas o física. Lograr tomar distancia de las cosas y donarlas ha sido muy difícil, pero con paciencia y tomándome el tiempo necesario lo he conseguido. 

Conservo ahora lo mas significativo, lo mas característico de tí, lo que te representa y hace que te imagine de inmediato. Dos cajas de tesoros guardados que me hablan de ti y del tiempo que compartimos. Te amo y te mando un beso grande al cielo.

16 abril 2024

Correr sin ti...



Querido amor, no te he contado que ahora estoy corriendo en el parque Reducto. Cuando íbamos a jugar  con Ram no imaginamos que algún día entrenaría ahí. Esta lleno de recuerdos contigo. Te veo jugando con la pelota, corriendo por la rampita y cantando. Dándole arroz a los pajaritos. Mojándote con la manguera y riéndote como otro niño. Disfrutando mucho de tu papel de Opa. 

 La verdad, no había contemplado la posibilidad de correr sin ti, se me hacía muy doloroso pues es una actividad que siempre relacionaré contigo. Cuando nos conocimos solías salir a correr con Pedro a la Costa Verde, recorrían largas distancias hasta terminar agotados, agotados pero felices.

Los vaivenes de la vida te fueron alejando de esta actividad que tanto disfrutabas. El estrés, el trabajo, los horarios, todo confabulaba en contra. Pasados muchos años, te propuse correr juntos. Primero dijiste que no, ya no te apetecía salir, te ponía incluso nervioso hacerlo. Pero logré convencerte, y saliste temeroso. Dimos una vuelta al parque y no veías las horas de volver a casa. Era como si tuvieras una fobia de estar ahí...

Y volvimos. Y al día siguiente igual, hasta que te animaste a una segunda vuelta. Y así fuimos aumentando hasta que te volvió el entusiasmo y decidiste que te prepararías para correr en una maratón y lo lograste. Y no solo una vez. Participaste en varias oportunidades y atesoro tus medallas y recuerdos.  Estabas muy orgulloso de tus logros y la última maratón que corriste coincidió con tu cumpleaños justo antes de la pandemia . Lo disfrutamos muchísimo.

Te fuiste un mes de enero y recién en  abril me decidí  a empezar a correr sin ti. Sentí que debía hacerlo, tanto por mi salud física como mental.  Que difícil fue ese primer día, te imaginaba corriendo a mi lado, dándome ánimos para acelerar o contándome cosas mientras corríamos.  No te niego que esas primeras veces lloraba al correr. Lloraba y te hablaba. Te prometía estar bien.  Te decía que vueles en paz.  Te sentía cerca, y te hablaba mucho. Un año ha pasado ya desde ese primer día. Ya no lloro al correr, pero si te sigo imaginando y sintiendo cerca. También te sigo hablando. 

Te amo mucho.

10 abril 2024

15 meses



Hola amor, han pasado ya 15 meses desde tu partida y me parece increíble cómo el tiempo voló. Poco a poco voy teniendo mas días serenos. Cuando recién te fuiste, una buena amiga me dijo que lo mas difícil sería el primer año pues ahí tendría que afrontar por primera vez las fechas importantes sin ti,  y así fue.

Fue complicado recorrer nuestros cumpleaños, aniversarios, cumpleaños de los chicos, navidad, año nuevo, y en cada ocasión recordar que ya no estás e imaginar cómo hubiera sido si aún siguieras. Qué te hubiera entusiasmado hacer. Cómo habrías querido celebrar. Cuánto habrías hecho por verme feliz, porque te gustaba mucho verme reír.

Y a veces me sucede que una palabra, una canción, un olor, un objeto, traen a mi mente algún recuerdo especial y me viene la nostalgia. Sin ir muy lejos me ocurrió el domingo en el almuerzo. Sonó en la radio una canción que te gustaba mucho y me agradó escucharla y pensé "está aquí con nosotros". 

Mas luego, sonó otra que también te gustaba, pero me evocó una tarde en especial. Aquel día estuvimos sentados horas en el sillón, escuchando  canciones en youtube, cada cual presentándole al otro sus temas favoritos, e incluso cantamos. Y este recuerdo si me puso triste pero luego pasó y retornó la calma.

 Te mando un beso hasta el cielo. Te amo.

07 abril 2024

Certezas no tan ciertas...


 

Querido amor, hoy pensaba en como un instante puede cambiar tan abruptamente la vida o traer abajo lo que uno da por sentado. Nuestras certezas. Nosotros, por ejemplo, siempre pensamos que teníamos aún mucho camino por recorrer juntos y muchos sueños por realizar. 

Cuando recién nos conocimos, solíamos hacer planes. Cuando estudiábamos alemán, por ejemplo,  nos imaginábamos que ambos lográbamos viajar a Alemania y mirábamos en el plano cual sería el punto intermedio ideal entre nuestras ciudades para encontrarnos allá.

Otras veces, en nuestras largas caminatas/conversaciones por el centro de Lima, nos encontrábamos al conjunto de folklore "blanco y negro" tocando en las calles y al compás de su música soñábamos con vivir en el campo cerca de un río y alejados del bullicio de la ciudad.

Cuando nos dedicamos a la repostería, aún muy jóvenes,  nuestro sueño era tener una gran fábrica que diera trabajo a muchas personas  y donde estas personas se sintieran contentas de trabajar en un ambiente familiar y con las mejores condiciones. Recuerdo incluso nuestros paseos dominicales con los dos chicos que trabajaban con nosotros y que compartían nuestros sueños. 

La vida fue cambiando su curso y nos fue guiando por diversos cauces. Emprendimos muchos proyectos. Y agradezco a la vida que aprendimos a fluir por sus aguas, algunas veces con facilidad, otras nadando contra corriente. 

Y así acumulamos vivencias y experiencias que recordar. Extraño seguir haciendo planes juntos y te amo mucho.


02 abril 2024

Detener el tiempo...



Hola amor, sabes? Desde que te fuiste el cucú no ha vuelto a sonar. Cuando nos lo regalaron fuiste tú quien se ocupó de instalarlo,  aprender a usarlo y  darle cuerda cada día. Eras tan metódico en eso que hasta tenías la hora del día en que lo hacías. Y a mí aún no me ha provocado investigar como echarlo a andar, creo que una parte de mí se niega a volverlo a escuchar, ya llegará el momento. 

Tu reloj pulsera me acompañó los  primeros meses, tenías una alarma programada que sonaba cada día y yo no la desconecté. Me agradaba escucharla sonar pues sentía que ahí venías a visitarme. Incluso cuando sonaba te saludaba. Este también ya se detuvo. Cuando dejó de sonar pensé que ya te tocaba descansar.

Y los otros relojes de casa se fueron deteniendo cada uno en distinto momento, y así fueron quedando. Era gracioso cuando quería saber la hora y en cada habitación marcaba una hora distinta y tenía que guiarme por la hora del celular.  Creo que algo en mí se había quedado en ese antes de tu partida y yo inconscientemente no quería cambiar las cosas.

Sin embargo, la semana pasada me decidí y empecé a cambiarle pila a los relojes, y ponerlos a la hora. Ahora me agrada verlos funcionar y sonrío de recordar cuanto tiempo estuvieron detenidos sin que me importase. Parece que voy avanzando y seguro tú estás contento de notar esto.  Ya llegaré al cucú. Te amo.